Hagamos una reflexión
Si a cada niño que naciese hoy, se le metiese 3.000€ en una inversión (los típicos regalos de abuelos, padrinos, amigos etc.) en S&P 500, y teniendo en cuenta el interés medio que viene dado en los últimos 25 años (aproximadamente un 7,2%), esa persona cuando se jubile a los 67 años, podrá disfrutar de una pensión mensual de 3000€ durante 25 años. La practica habitual hace 35-40 años era abrir una cuenta y meterlos en ella, al 0% de rentabilidad
Pero, ¿Qué es el interés compuesto? ¿Qué es lo que lo hace tan interesante?
El interés compuesto consiste en que los intereses que se van logrando con las inversiones se unan al capital sobre el que aplica el rendimiento, de forma que el capital de base va creciendo y por tanto, manteniendo constante la tasa de interés, también van creciendo las ganancias.
Para ello aquí está la clave: La regla del 72
Existe una famosa regla, llamada la regla del 72, que demuestra el efecto del interés compuesto a lo largo del tiempo. Dicta que su dinero se duplicará aproximadamente en un periodo de años que se determina dividiendo 72 entre la cifra del interés devengado. Así, con un interés del 2%, se necesitan 72 entre 2, es decir, 36 años; con un interés del 4%, se necesitan 18 años, con uno del 6% bastan 12 años… y así sucesivamente. Esto demuestra que el efecto del interés compuesto, con el tiempo suficiente, puede ser importante para acumular un buen ahorro de cara a la jubilación.
Así que ya sabes, con pequeñas inversiones podemos hacer cosas muy grandes. La clave: el ahorro a largo plazo y la conciencia de tener una base importante de ahorro para el futuro
¡Pregúntame y te resuelvo todas tus dudas!